“IFE no será la burla de las televisoras”
Con un talante sereno y serio, primero, y bromista y relajado, después, pone de manifiesto sus convicciones sobre la emisión de mensajes de partidos y el papel de la institución a su cargo. Dice que los consejeros del órgano electoralno serán verdugos o censores de la libertad de expresión. Asegura que la democracia necesita a un Instituto actuante, fuerte, que aplica la ley sin temor.
Tomado del: El Universal.
Jueves 19 de febrero de 2009.
Mantiene el tono mesurado, no se altera, pero, Leonardo Valdés Zurita sentencia que el Instituto Federal Electoral (IFE) no es rehén de las televisoras, ni será su burla. Desde luego, agrega, que estas empresas no tienen ningún certificado de impunidad o de privilegios, tendrán que cumplir la ley y si la violan, serán sancionadas.
En este sentido, en entrevista con EL UNIVERSAL, adelanta que en la sesión del Consejo General de la institución a cargo de los comicios de mañana viernes, él mantendrá su postura de que haya sanción, si es que se comprueba una nueva falta al Código Federal de Instituciones y Procesos Electorales (Cofipe), ahora, porque dejaron de transmitir los mensajes de los partidos político y del propio organismo electoral.
Luego, el consejero presidente sentencia: “La democracia necesita a un IFE actuante, fuerte, que aplica la ley sin temor. Sin ser temerario, pero firme”.
Un despacho, el suyo, en el que hay fotografías de su familia, otras de él en distintas etapas de su carrera como militante de la izquierda en el Partido Mexicano de los Trabajadores, como académico, y funcionario en el instituto que hoy preside. Mantiene, pese a todo, el buen humor, bromea así sobre la posibilidad de que el Necaxa, su equipo, descienda a la segunda división disfrazada de Primera A.
Y con ese talante sonríe, expresa que él no dirá: “¿Y yo por qué?” ante las críticas, las caricaturas, los comentarios en su contra, por la decisión que tomó la semana pasada el IFE de sobreseer el caso de las televisoras, no sancionarlas por haber transmitido en bloque los mensajes de los partidos políticos durante los juegos de futbol.
“Yo voté con otros cuatro compañeros en un sentido, cinco lo hicieron en otro. Perdí en un proceso absolutamente democrático y por lo mismo, por convicción, hice mía, respeté la determinación. Y desde luego, esto tampoco quiere decir que haya división en nuestro organismo, hay, puede haber diferencia de opiniones, de criterios, pero no fractura. Al contrario, estamos unidos ante el reto de sacar adelante el próximo proceso electoral, y el del año 2012, con limpieza y, repito, el respeto de todos, sin excepciones, a la ley”, asegura convencido.
—¿No hay entonces “teleconsejeros”, integrantes del consejo que respondan a los intereses de las empresas y no de la sociedad?
—Con toda certeza te digo que confío en el trabajo profesional de mis compañeros. A algunos los conocí desde hace muchos años, a otros no, pero no me cabe duda alguna de la honestidad, el profesionalismo de todos, la convicción democrática.
Leonardo Valdés, el sereno. El que sin embargo, pone un especial énfasis a sus palabras:
“Por ningún motivo, por ninguno, somos o seremos verdugos, o censores de la libertad de expresión. El IFE nació para que la democracia se desarrolle en el país, sin la democracia nuestro instituto, que es de la nación, no podría vivir. Y la libertad de expresión es fundamental. Ni en la ley ni en nuestras intenciones o convicciones está actuar como censores de los partidos políticos o de los ciudadanos. Los partidos están obligados a observar un código de conducta, nosotros estaremos atentos a recibir denuncias, y si es el caso, a sancionar”.
Y ya sin pregunta, espeta:
“Pero eso es muy distinto a censurar a la sociedad, a los medios. Mira, la reforma electoral no limita la libertad de expresión, sí la de comercio. Se gastaba demasiado dinero de particulares favoreciendo a determinados candidatos o partidos y esto iba contra el principio de equidad. También había la idea, fundada, de que la democracia, los procesos electorales eran demasiado caros. Y eso le costaba a la gente, al país, eran recursos públicos”.
—¿Cuánto se dejará de gastar por concepto de difusión de mensajes?
—En términos globales, unos 3 mil millones de pesos, y quizá eso, dejar de ganar esa cantidad, sea un elemento que a algunas empresas les causa alguna inconformidad.
—Oye, ¿sí será efectivo el blindaje electoral?
—Esa es una de las tareas que hemos tratado con mayor cuidado. En octubre, el PSD solicitó un convenio con el Centro de Investigación y Seguridad Nacional (Cisen), posteriormente el presidente del PAN nos envió una carta con una propuesta de blindaje. Nos pusimos a trabajar. Logramos llegar a un acuerdo. Los partidos serán fundamentales para que la intención se cumpla. El IFE actualiza sus métodos de fiscalización, no esperaremos al final de las campañas, actuaremos, haremos trabajo de campo, en el transcurso de las mismas. Haremos pues nuestra tarea, y la haremos bien, pero sin rebasar nuestro ámbito de responsabilidad. No somos, no podemos ser Ministerio Público, nosotros no perseguiremos —no podríamos— a posibles proveedores de recursos ilícitos. Presentaríamos las denuncias correspondientes, pero las autoridades competentes tendrán que intervenir en su momento.
Leonardo Valdés Zurita. Otra vez sonriente, cuando platica que es común que en sus oficinas desayune, coma. “Ya casi vivo aquí, y lo que falta” dice. Pero aclara de inmediato, no se arrepiente de haber buscado llegar a la presidencia del Consejo General del IFE. “Vine, y sigo, seguiré, con toda la convicción, con el entusiasmo, con preparación. Y vamos a cumplir nuestra tarea, lo acreditaremos, no habrá espacio para la duda”.
